Ornella de la Vega

Durante Enero y Febrero del 2011 viajo por primera vez al Sur de India, al estado de Kerala y Tamil Nadu, realizando estudios de diversas técnicas corporales y artísticas (Kalarippayattu, Canto Carnático, Kathakali y Bharata Natyam) en el Center for Creative Practice, SADHANA. En este viaje tuve la suerte de conocer y aprender de diversos maestros que han dedicado una vida completa al estudio y trabajo en torno a cada una de estas disciplinas. Tuve la fortuna de compartir no sólo sus conocimientos y su visión respecto al arte, sino también su día a día, su cotidiano.

La eduación de estas artes tradicionales indias se diferencia del aprendizaje artístico que recibimos habitualmente en Occidente en  distintas casas de estudios, las cuales establecen una relación institucionalizada en torno al arte y a la educación en sí. En India estas disciplinas artísticas se caracterizan por su tradición oral, su linaje y por ende su línea condiscipular. Es decir, tu estudias con un maestro en particular, no con una escuela o institución. Esta manera de traspaso de los conocimientos permite establecer una educación más particularizada que ahonda no sólo en una estética artística, sino en una filosofía de vida y un profundo respeto por las tradiciones, las cuales son inseparables de la práctica devocional que cada una de ellas ofrece a diversas divinidades hinduistas. El arte por tanto, comulga con una práctica ritual y sagrada ofrecida a un otro, que lo aleja de la caracterizada egolatría del arte occidental, ya que transciende la individualidad del artista en pro de una comunión colectiva con la divinidad. 

Es así, como por medio de esta hermosa entrega de maestros indios, una vez de regreso en Chile, intento mantener los principios fundamentales e ideológicos de estas disciplinas, pero volcándolos a nuestro cotidiano, a nuestra sociedad y a nuestra cultura.

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